En la entrada de hoy queremos hablaros de algo que comúnmente no se le presta especial atención, y al contrario de lo que muchas veces se piensa son factores determinantes que condicionan toda una actuación de interiorismo.
Elegimos muebles, tipos de suelos, color de paredes, puntos de iluminación, estilos decorativos, textiles…todo un conjunto de texturas importantes, pero la pregunta que nos debemos de hacer es, ¿Que transforma una vivienda en un hogar y la decoración en un estilo? Los detalles. Esos pequeños adornos, ese libro en colocación asimétrica, ese cuadro o lámpara que nadie más que tu habría colgado en ese punto, que al mismo tiempo que crea espacio, imprime a tu hogar de ese toque cargado de tu personalidad propia.
No se puede entender la decoración y el interiorismo sin los detalles, ya que ellos son factores imprescindibles para marcar la diferencia.
Una botella de vino vacía usada como separador de una librería, una hermosa jaula completando un escritorio, unas flores secas colocadas de forma estratégica para distraer el punto focal de una estancia, son esas cosa que pensadas y bien materializadas son de las que hacen que nuestra casa cobre vida de forma inmediata y se vuelva nuestra desde el primer momento.
Cuando buscamos acabar una intervención y llega el momento de esos matices, esos detalles, debemos de tener una cosa en cuenta, y no es otra que buscar usos distintos a los objetos cotidianos, colgar una lámpara donde debía de haber una de pie o sobremesa. Usar las normas para saltarlas o aplicarlas a nuestra manera. Es la mejor forma de que la importancia de los detalles sea la misma importancia que tú tengas en el ambiente de tu hogar.
Te sorprenderás como cambia tu casa, cambiando los detalles, te esperamos para ayudarte.